Museo CJV prestó 3 obras de Martha Pacheco para ésta exposición

 

Invitación

 

 

Muestran arte 'de paso'

 

Javier Arévalo inaugura hoy una exposición con el tema del erotismo en El Hotelito.

Foto: Marte Merlos

   

 

Encuentra Javier Arévalo espacio para la expresión artística

 

Alejandro Alvarado

 

 

MURAL Guadalajara,  México (14 febrero 2008).- ¿A cuánto rentas las habitaciones de El Hotelito?, preguntan sexoservidoras al dueño del espacio, el pintor Javier Arévalo. Él, con humor responde que cambió de giro el lugar, ahora sólo se hospedará el arte.

 

A media cuadra de la Vieja Central Camionera, en la Calle 28 de Enero número 740, en medio de negocios y fondas está el ex hotel de paso, espacio donde Arévalo desarrollará un proyecto experimental que consiste en exhibir arte en esta zona donde el robo de autopartes, el asalto y la prostitución están presentes.

 

Hoy se inaugura la exposición "Mojando la Brocha" con la participación de más de 40 artistas plásticos, entre ellos Alejandro Colunga, Lucía Maya, José Fors, Benito Zamora, Luis Valsoto, y escritores como Fernando del Paso, Raúl Bañuelos y Carmen Villoro.

 

 

Arévalo puntualizó que el espacio exhibirá las obras durante 15 días, y dependiendo de la respuesta del público, se decidirá si fungirá como una galería o un hostal de artistas, entre otras ideas.

 

El Hotelito, que Arévalo adquirió a través de un intercambio de obras de arte, tiene 16 habitaciones en las que ahora el sexo y el erotismo están presentes a través de pequeñas obras.

 

Debido a la naturaleza del espacio, dijo el artista, la exposición que hoy se inaugura manejará como tema común el erotismo y se desarrollará en arte objeto, escultura, pintura, instalación y performance.

 

"Yo voy a exponer una escultura, cuadros y una pequeña instalación. No (puedo decir más de las obras), son sorpresas", agregó.

 

Francisco Barreda, director de Artes Visuales de la Secretaría de Cultura, y quien trabajó con Arévalo para reunir el trabajo de los artistas, comentó que el proyecto busca llevar arte a una zona olvidada, pues a pesar de que está El Globo Museo del Niño y el Patio de Los Ángeles, la zona de la vieja central está descuidada.

 

Hasta ayer, El Hotelito aún era preparado para recibir al público. En su azotea se terminaba de poner los barandales porque también será utilizada.

 

Sillas, sillones y colchones aún estaban dentro del espacio, sin embargo gente que trabajaba en la finca dijo que serán utilizados por los artistas.

 

El Hotelito y "Mojando la Brocha" se inaugurarán a las 21:00 horas. Después, el espacio estará abierto de 17:00 a 20:00.

 

 

Mojando la brocha, con su propuesta de artes plásticas y literatura, tuvo padrino de lujo: Fernando del Paso
 


.

 

 

Una lluvia de condones acompañó los apretados pasos de los asistentes. Foto: Rafael de Río

El amor, dicen, sabe mejor en un hotel de paso. Y si hay motivos visuales que inciten el deseo, mejor. La carne, ayer, se volvió palabra, brochazos, rozamientos

Carne y arte copulan en El Hotelito

Público 15-Febrero-08

El deseo tomó las formas lúbricas creadas por los artistas. Se convirtió en el objeto de las miradas de los espectadores que, como buenos voyeuristas, pusieron la mirada en camas donde los amantes dieron rienda suelta a la pasión, en los muros donde el erotismo se convirtió en verso. Caminaron bajo la lluvia de condones. El Hotelito de Javier Arévalo abrió sus puertas con una invitación difícil de ignorar: Mojando la brocha complació con su mezcla de artes plásticas y literatura.

La historia, peculiar como el recinto: un coleccionista de Arévalo llegó, un día, con una propuesta: cambiar obra del pintor por un hotel. Descabellado por donde se le vea, el artista aceptó. “Es una aventura. El artista debe tener capacidad de aventura. El que no la tenga, que ni se meta”, afirmó Arévalo. De entrada, su invitación superó por mucho las expectativas: los catorce artistas invitados en un principio se convirtieron en 50. Los asistentes, en cientos, que incluyeron a Fernando del Paso, artistas, poetas y demás: los pasillos del hotel resultaron insuficientes, dotando el ambiente de una vibra peculiar: cuerpos moviéndose entre cuadros y esculturas eróticas, todos rozándose al entrar a las pequeñas habitaciones y pasillos. Fue noche, también, para sacar al voyeurista que todos llevan dentro. En el edificio de enfrente, una chica ejecutó un performance: luego de una ducha, ofreció a los asistentes un streap tease a la inversa: del desnudo total a la colocación del vestido.

Como amor ocasional, el futuro de El Hotelito tiene un futuro incierto. Su dueño no sabe qué va a pasar después de la primera exposición. “No hay un proyecto, fue una cosa espontánea”, afirma Arévalo. Por lo pronto, aún hay tiempo para convertirse en voyeurista del arte: Mojando la brocha permanecerá quince días y se podrá visitar diario, de 17:00 a 20:00 horas, en 28 de Enero 740, a unos pasos de la vieja central camionera.

 

 

 

Guadalajara. Édgar Velasco Barajas

 

Eros para ver

 

 

Una 'lluvia' de condones atraía la atención de los visitantes a El hotelito en la inauguración de 'Mojando la Brocha'.

Foto: Marte Merlos   

 

Inauguran 'El Hotelito' en la zona de la Vieja Central

 

Jonathan Lomelí

 

 

MURAL Guadalajara,  México (16 febrero 2008).- "Este lugar está cargado de amor, de fornicación", expresó el escritor Fernando del Paso, durante la exposición de pintura y poesía erótica "Mojando la Brocha", en El Hotelito, donde participó junto a más de 40 artistas invitados.

 

En cada una de las 16 habitaciones de El Hotelito, antes escenario recurrente de cópulas y deseos carnales, ahora se hospedan los "brochazos" figurativos y literarios de pintores y escritores aludiendo con sus obras al erotismo.

 

La alcoba 1 alberga las pinturas del artista plástico Javier Arévalo, dueño del lugar, quien transformó en galería de arte este hotel de paso, ubicado en el corazón del Barrio de Analco, en la Calle 28 de Enero 740, en una zona asociada con la "trácala" y el sexoservicio.

 

 

 

"Así se inició el Greenwich Village o el Soho en Nueva York, en lugares muy deprimidos, verdaderamente peligrosos, pero ¿qué pasó cuando los artistas se metieron en esos barrios?: se transformaron", señaló Arévalo.

 

El Soho, un barrio de Manhattan, en Nueva York, se pobló de artistas durante los años 70, influencia que transformó su dinámica y elevó la calidad de vida de los habitantes del lugar, dejando atrás su situación marginal.

 

"Yo nací en esta Ciudad y soy de un barrio, nací en el barrio del Santuario que en su tiempo también fue un barrio bravo", agregó el reconocido pintor tapatío.

 

La arquitectura de El Hotelito es íntima, de espacios reducidos, rincones y alcobas ceñidas. Tras subir las escaleras, el visitante es recibido por una lluvia de condones rellenos de agua.

 

"A la gente le gusta 'ver gotitas'", bromeaban los asistentes.

 

Rebosantes de erotismo y fornicaciones, las obras de José Fors se hospedan en la alcoba 8, Lucía Maya en la 7, Cornelio García en la 5, y Luis Valsoto en la 2, entre varios más.

 

En cada muro antes invadido por la humedad y las "pintas" amorosas, ahora se hallan poemas de Ricardo Yáñez, Luis Medina Gutiérrez, Raúl Bañuelos, Jorge Esquinca, Luis Vicente de Aguinaga y Carmen Villoro, entre muchos otros.

 

"¿De qué estamos hechos que tocarnos nos gusta tanto?", se leyó en un muro donde el verso del poeta Ricardo Castillo se instaló.

 

Encantados, los más de 100 asistentes, iban y venían subiendo y bajando escaleras, entraban y salían de las habitaciones, se detenían frente a los versos, hasta que dieron las 22:00 horas, tiempo de presenciar un performance voyeurista en el hotel de enfrente.

 

La idea de José Fors fue la siguiente: una mujer en ropa interior se alacia el cabello, se maquilla frente al espejo y se mueve de un lado a otro dentro de una alcoba frente a El Hotelito.

 

"¡Esto sí es arte conceptual!", celebraban los voyeuristas amontonados en la azotea de El Hotelito para recrear su pupila desde el mejor ángulo posible.

 

El sabor populachero del recorrido por cada una de las alcobas, estuvo ambientado por un grupo de música ranchera que entonó los acordes profundos de las canciones más célebres del "rompe y rasga" tradicional, bañadas con unos tequilas que ofreció el brindis inaugural.

 

El Hotelito, galería de arte, desaparece en 15 días si la gente no lo visita. La intención de Arévalo es mantenerla como prueba por este tiempo; si la respuesta es positiva, habrá arte "de paso" para rato.

 

"Un chin.. de carros ora sí, ¿cada cuándo se va a poner así?", preguntó Isaúl, cuidador de autos de la Calle 28 de Enero. La respuesta dependerá del público tapatío.

 

 

Mejora salud Fernando del Paso

 

Fernando del Paso, Premio FIL de Literatura 2007, asistió sólo unos minutos a la exposición de pintura y literatura erótica "Mojando la Brocha", en El Hotelito, donde participó con dos sonetos y una pintura.

 

Minutos antes del arribo del público, citado para la inauguración a las 21:00 horas del viernes, el autor de Palinuro de México se retiró tras expresar que se encontraba en óptimo estado de salud, ya sin silla de ruedas, pero prefería privilegiar su reposo en casa.

 

Sólo una cosa lo perturbó un segundo: el error por el cambio de una vocal en uno de sus sonetos, pero encargados de montar la exposición le aseguraron que la errata se eliminaría a más tardar al día siguiente.

 

"Se suman la pintura y la literatura, están separados y sin embargo están juntos, yo diría que forman una pareja erótica también", dijo concediéndole a la galería su pronóstico más optimista de éxito y duración.

 

 

 

 

-------------------------------------------------

Buscan ampliar El Hotelito

Afirma Javier Arévalo que su galería en la zona de la Vieja Central da trabajo a teporochos
 
MURAL ABRIL 15,2008

El Hotelito tendrá más arte para hospedar en sus cuartos.

Hace dos meses las prostitutas le preguntaban al pintor Javier Arévalo, dueño de esta galería que antes fue hotel de paso: '¿a cuánto rentas los cuartos?', ahora le cuestionan '¿cuándo es la próxima exposición, pues?'.

La permanencia de El Hotelito como galería dependía de la respuesta del público. Inicialmente se pensó que durara 15 días, pero han sido tantos los asistentes desde su inauguración -el 14 de febrero con la exposición "Mojando la Brocha"-, que su dueño ya está preparando otra segunda exhibición de arte y además piensa adecuar el espacio en su planta baja para dar cabida a obra de gran formato.

"Vamos hacerle modificaciones a los dos locales (que hay en la planta baja), los vamos a unir (al hotel, ubicado en la zona de la Vieja Central Camionera, Calle 28 de Enero número 740) y vamos a hacer una sala grande, el arquitecto ya está trabajando en las adecuaciones y esperamos esté para la próxima exposición", dijo Arévalo.

Aún no sabe cuántos y qué artistas participarán en la exposición, sin embargo adelanta que será variada la temática y que se inaugurará el 29 de abril, fecha en que Arévalo (1937) cumple años.

Arévalo describe el éxito de la galería, la cual fue planeada casi espontáneamente por un grupo de amigos, como un fenómeno accidental en el que han participado todos los sectores.

Explicó que "Mojando la Brocha", exposición que al principio se visualizó con la obra de 14 artistas –uno por cada cuarto que tiene El Hotelito- y terminó sumando 53, acudieron como espectadores desde teporochos hasta prostitutas de la zona, además de estudiantes, vagos, intelectuales y gente que por ahí iba pasando.

"Lo más curioso es que funcionó y fue un fenómeno, dijimos 'lo dejamos unos días', pero ha estado todo este tiempo y la gente sigue yendo a visitar el lugar que no es apropiado, el barrio menos, no esperábamos tanta aceptación", dijo.

Incluso, agregó el pintor jalisciense, los 'teporochitos' se han puesto a trabajar con El Hotelito, encargándose de la limpieza y el cuidado del lugar, además han sido guías de viajero, pues cuando los visitantes no encuentran la galería, ellos los conducen.

"Realmente nos sorprendió cómo la gente ha participado, no hemos tenido ninguna agresión; la gente de allí… es un barrio difícil, popular y está muy deprimido, la gente lo adoptó y mire que andan ahí teporochitos, las edecanes de la galería son la Tostada y la Guayaba", comentó.

Así lo dijo

"Dicen que cuando las cosas salen bien hay que seguirle, vamos a ver si sigue bien, pero por lo pronto haremos una segunda exposición".
Javier Arévalo
Dueño de El Hotelito.