|
Uno de sus discos se llama “soy lo que soy”, ¿qué es?
Alguien que nació para hacer música. La canción está inspirada en un
poema de León Felipe que dice que cada uno tiene su camino por el que no
va nadie más. Si hacemos una metáfora; algunos árboles dan peras, otros
dan manzanas, otros, aguacates, y a veces uno quiere ser algo que no es.
¿Cómo saber si se es guamúchil o guayabo?
Cada quién debe averiguarlo. Yo nací para hacer música y eso me permite
estar viva, de eso no tengo duda y eso me moriré haciendo, aunque hacer
música no es lo más afortunado en el sentido material.
¿Alguna vez dudó?
Siempre supe que la música era lo mío, nunca lo pensé. No me pregunté si
iba a cantar porque siempre lo he hecho y no pierdo la esperanza de algún
día poder vivir de mi música. Traigo la música desde siempre.
¿Como traer una mano?
Me cuentan que desde muy chiquita cantaba las canciones de Cri-Cri y cuando se me
agotaba el repertorio empezaba a inventar. Así empecé a componer y no me
paraban de cantar, como que es algo que ya venía conmigo.
¿Herencia?
Un poco porque mi padre era un gran melómano. Tenía una colección
increíble y siempre había música en mi casa. Además una tía me enseñó a
cantar.
¿Cuál fue su primera composición?
Ya una canción completa, fue a los diez u once años y era algo sobre la
amistad. Fue en el colegio Guadalajara donde siempre promovían la
creatividad. Recuerdo que mi papá me ayudó a completar la letra y yo puse
la música.
¿La típica niña del coro?
Sí y también en la estudiantina. Fueron buenos momentos porque fuimos a
cantar a la cárcel, fuimos con los ancianos. Eso era lindo, no sólo
cantar en los escenarios, sino también en esos lugares.
¿Cómo se compone una melodía?
Más que yo las busque, las melodías me siguen a mí. De pronto se me
ocurren las cosas cuando menos pienso. A veces, dormida, empezaba a
escuchar una melodía y no me dejaba. Me tenía que levantar a tocarla
porque luego se me olvidaba. Yo escucho las melodías como si tuviera
dentro una grabadora.
¿Como si no hiciera nada?
Eso parece. A veces cargo una grabadora porque cuando voy por la calle se
me ocurre algo y si no lo registro se me olvida, he perdido muchas
melodías.
¿Las tiene que atrapar?
Sí, si se me atraviesa una melodía no oigo nada más, me voy. Muchas veces
me pasa. Me da vergüenza que estoy hablando con alguien y se me ocurre
algo. Entonces se me va la onda y ya no escucho a la persona porque
empiezo “ta, ra, ra, ra”, como si fuera
autista.
¿Qué parte de la melodía es?
Puede ser cualquiera, muchas veces es un coro o muchas veces es un
inicio.
También compone música formal ¿Es igual de fácil?
Una canción me sale muy fácil, la música formal implica muchísimo
trabajo, tienes que ir viendo las armonías, cómo suenan los instrumentos,
cómo se cruzan. Me he tardado hasta un año.
¿Instrumento favorito?
La guitarra es mi compañera, la llevo a todos lados y siempre tengo
problemas en los aviones. Una vez discutí fuerte con una azafata que
quería bajarla y le dije: ‘no, no, se va conmigo’. Es como si me llevasen
un pie.
¿La mejor hora para componer?
La noche, sin lugar a duda. Jamás por la mañana.
¿Qué opina de componer por encargo?
Es un reto y me ha gustado. He hecho música para cine, para noticiarios,
para comerciales. He tenido experiencias muy curiosas, una vez trabajando
con un amigo en unos jingles hicimos uno sólo por diversión. Era el peor,
el guácala. Y fue el que quedó. Casi les
decíamos: “por favor no digan que nosotros lo hicimos” (risas). Tienes
que darle gusto al cliente y también me divierto, no es un suplicio.
¿Cuál de sus jingles es mejor?
Más que el mejor, uno que se tocó muchísimo, era para una promoción de
una compañía de agua y decía: “ármala, ármala, ármala en grande”. Ese
sonó mucho porque tengo facilidad para hacer melodías pegajosas, no sé si
son buenas o malas, pero de que se pegan, se pegan.
¿Disfruta cualquier música?
No me gusta la música de banda, ni las cumbias y es muy triste porque es
la que más se oye.
¿Su nota favorita?
Sol.
¿Por qué?
No sé, es intermedia entre lo más agudo y lo más grave, me gusta esa nota
por su nombre.
¿Qué tiene la música que no tengan otras artes?
Me gusta porque es la más abstracta, porque te puede mover a otros
mundos, más que otras artes, precisamente porque es intangible.
¿Quién es?
Nació en Guadalajara, “un 28 de enero y ya”. A los quince años ingresó a
la escuela de Música de la UdeG y
posteriormente estudió Ciencias de la Comunicación en el ITESO. Promovió
la creación de la escuela de cine de la UdeG y
fue parte de la primera generación. Hizo teatro y tiene una amplia
trayectoria en la radio. Ha grabado dos discos como solista y otros tres
colectivos. Es autora de una quincena de piezas de música formal.
Actualmente cursa un doctorado en comunicación audiovisual, en Barcelona. |