Ámbito, cultura

 

Exposición de Pinturas de Jorge Alzaga en

Galerie des Artistes

 

La Galerie des Artistes inauguró este viernes una exposición con la obra del maestro Jorge Alzaga. Este pintor mexicano estudió en la Esmeralda durante cuatro años del 1954  a 1958.  Pertenece a un grupo de pintores luchones que se abrieron paso, cuando en México eran pocas las galerías y menos aún los coleccionistas. Su vocación queda definida cuando a los 12 años gana un concurso nacional de pintura. Fueron los años en que trató a Diego Rivera y a Frida su esposa antes de su muerte. También fue la época en que conoció a Siqueiros antes de que lo encarcelaran. A los 18 años puso su primer estudio, y al recibir el premio que le ofrece la Plástica Mexicana atrajo el interés de la Galería Mizrahi, en México, y de otra galería en Canadá con las que comienza a darse a conocer.

En sus viajes a Nueva York Alzaga entró en contacto con la obra de grandes maestros. Al resolver la composición espacial considerando la música como un recurso para explicar la armonía, va redescubriendo la belleza de la obra de Tamayo y de Matisse.

“En mi pintura me gusta mucho hablar del pasado”, dice Alzaga, “ese cuadro habla de mi infancia… ese otro es mi adolescencia… Un poco de surrealismo, un poco de simbolismo y a veces expresionismo. Pero sobre todo mucho color”.

Para Jorge Alzaga su pintura es toda imaginativa. No deja de recurrir a la simbología, elemento que invariablemente se encuentra en las escenas de cada una de sus obras. Alzaga prefiere no hacer pintura “digerida”, como él la llama. Insiste en el hecho de que el público tiene que encontrar el mensaje de su obra en cada uno de sus cuadros. Que se metan en ese mundo, y que a través del tiempo, se tengan interpretaciones diferentes.

En la obra de Alzaga pueden distinguirse tres etapas: Cultivó el expresionismo (1959-1963) muy influenciado por Kokotchtka, y aplicó colores que le habían inspirado las pinturas de Caravaggio. Más tarde regresó a la pintura figurativa (1971-1975), tiempo durante el que se consagra a una búsqueda constante para reafirmar su vocación.

“En 1975”, dice el maestro “el abstracto me abrió los ojos al enfrentar el espacio con una libertad total para desarrollar la forma y el color. Con nuevos colores, muy de la época renacentista, que no tenían nada que ver con lo que estaba haciendo entonces. De ahí se desprende la tercera fase de mi pintura en 1975, cuando inicio un vaivén entre lo abstracto y lo figurativo. Ahora estoy alternando. Y he encontrado una riqueza enorme en la pintura.”

El pintor Alzaga consagra entre ocho y diez horas a su arte; es así que sus creaciones pueden cubrir una demanda importante de coleccionistas y de museos.

Los personajes de Alzaga nacen de la intimidad, de sus secretos, de lo profundo del ser. El gran tema de su pintura es la luz explotada por el pintor en esos rostros y esas sugerencias femeninas. Una tridimensionalidad y una volumetría que se antoja en el siglo XXI como natural, en días de una gran modernidad y en un contexto pleno de originalidad.

El maestro absorto de su pasión por la pintura quiere dedicar sus futuros trabajos a la fusión de su etapa abstracta con la figurativa. Su energía luminosa ha de guiarlo en su camino donde la luz se transforma en notas de color infinito.

La exposición continúa abierta al público durante el horario normal de la galería.

 

Galerie des Artistes,  Leona Vicario 248, Centro. Tel. 223 0006